lunes, 30 de mayo de 2016

Visiones de Arbórea [220516]



“Al principio sintió una enorme soledad moral, un aislamiento más completo, más impenetrable, que aquel en el que la había hundido el descubrimiento del acto de Denis. Porque entonces se había apoyado de manera imprecisa en un sentido colectivo de la justicia que debía responder a sus propias ideas de lo que era correcto y de lo que no. Todavía creía en la correspondencia lógica entre la teoría y la práctica. Pero ahora comprendía que entre los más cercanos a ella no había nadie que reconociera la necesidad moral de la expiación.” 
“Santuario”, Edith Wharton